Hace un par de semanas se estrenó la segunda parte de una de las películas de animación (aunque de acción real también) más divertidas y entretenidas que he visto en los últimos años. De hecho, fue mi película favorita del 2014, así que tenia muchas ganas de que estrenaran esta segunda parte, y, aunque esta por debajo de la original, la película ha estado a la altura. No pierde la frescura de la primera entrega, y aunque el factor sorpresa se ha perdido, sigue siendo muy efectiva tanto en sus bromas, como en la historia, que no aburre en ningún momento. De hecho, como ya pasaba en la primera entrega, estoy seguro de que muchas de las bromas y referencias no serán captadas por los niños, y es que me parece que su publico más concreto no son los más pequeños de la casa, sino un público de adultos jóvenes o juvenil. La película comienza justo donde nos dejó la primera parte, con la llegada de unos nuevos LEGO provenientes de otro planeta, y que no parecen tener muy buenas intenciones. Los protagonistas son capturados tras unos minutos de introducción y Emmet, que se libra del secuestro, será el que se encargue de salvarlos, o al menos intentarlo. Al parecer, no está siendo el éxito que se pensaba, sobre todo después de la buena acogida de la primera entrega, así que no se muy bien que será de esta saga de películas animadas. Hasta el estreno de la película que hoy nos ocupa, cada película que se ha estrenado ha bajado tanto en calidad como en recaudación, aunque a mi todas las entregas me han entretenido mucho, así que esperemos que haya más entregas en el futuro. Mientras tanto os dejo un breve spot, ya que si sois asiduos del blog sabréis que no soy fan de los trailers que revelan todo.
miércoles, 20 de febrero de 2019
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