lunes, 30 de noviembre de 2020

Malaka

Hace mas o menos un año, en el otoño de 2019, La 1 estrenó Malaka, una nueva serie española ambientada en Málaga, nuevamente con policías, drogas y un caso turbio por resolver. Aunque no es el género que más me apasiona, si esta bien llevado, suelen ser historias interesantes. Animado por los buenos comentarios, me decidí a verla, eso si, unos meses después de su emisión en abierto, el pasado verano. Es cierto que cuando se emitió se criticó un poco su comienzo, ya que tarda en arrancar y eso con el consumo actual puede suponer tu tumba anticipada. De hecho, las cifras de espectadores de los 2 primeros capítulos, distan bastante de lo conseguido en los otros 6. Aunque no fueron unas cifras para tirar cohetes, si fueran bastante estables, ya que una vez entras en ella, la historia engancha y quieres saber más y más. 

La serie está bastante bien llevada, entremezclando el tema de una nueva droga en la ciudad y los clanes que se reparten el comercio de la misma, con la desaparición de la hija de un promotor inmobiliario sin escrúpulos, que es muy poderoso en la ciudad. Además, los protagonistas tienen su propia personalidad y se diferencian muy bien unos de otros. Tenemos a Dario "Gato (Salva Reina), como el policía malagueño que se conoce al dedillo todos los trapicheos de la droga; a Blanca (Maggie Covantos), como la policía recién llegada de Madrid para apoyar a Dario en el caso; y por otro lado a Joaquin (Vicente Romero), un detective privado que también colabora con la policía. Además del trío protagonista, también tenemos a Antonio Gil, Laura Baena Torres (Vis a vis), Susana Córdoba (El ministerio del tiempo), Alejandro Casaseca, Ignacio Mateos o Cuca Escribano, entre otros. 

La verdad que la serie me sorprendió para bien, ya que va in crescendo, y el final me gustó por no ser el típico previsible. Aunque ya esta todo inventando en esto de la ficción, se agradece que aun sorprendan al espectador. En definitiva, 8 capítulos bastante ágiles (a excepción del primero), que demuestran una vez más que la ficción española tiene una gran calidad. 




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