El pasado febrero me fui hasta el Reino Unido un fin de semana a visitar a una amiga que vivía allí, y de paso, aprovechar para ver a la canadiense Carly Rae Jepsen en la gira de su último disco, "The loneliest time". Este disco, que publicó el pasado octubre, me convenció bastante casi a la primera, sobre todo con los singles "Beach house" y el homónimo del disco "The loneliest time", aunque sin desmerecer a otras como "Joshua tree" o la que da nombre a la gira, "So nice". El caso es que ya que estaba por allí y su gira europea solo visitaba las islas británicas aproveche para verla en concierto, ya que no la había visto nunca en directo, ni fui a verla al Mad Cool el año pasado. Todo un acierto porque así he podido escuchar varias de las canciones de este último disco, aunque también otras tantas de trabajos anteriores, y sobre todo de su tercer disco, "Emotion", que bien sabe es muy querido entre sus fans.
El concierto fue muy divertido y bastante directo, con la interacción con el publico justa y necesaria, para no perder tiempo y cantar cuantas mas canciones fueran posibles. Además, canta de maravilla y sabe disfrutar sobre el escenario. Se quitó antes de la mitad del concierto su cruz con "Call me maybe", que será su canción más conocida y todos corearon (incluido yo), pero diría que es de mis canciones menos favoritas de ella. Así dió paso, como he dicho, sobre todo a canciones de su último disco, y de "Emotion", que incluye dos de los mejores temazos pop de la historia como son "I really like you" y "Run away with me", pero también cantó temas de "Dedicated" (incluido la versión Side B con temas que no llegaron al disco principal), y cerró con "Cut to the feeling", que aunque me gusta, no es de mis favoritas, pero si la de su publico. Un publico entregado que me hizo olvidar que estaba en un concierto fuera de España, ya que fuera de nuestras fronteras a veces el publico es un poco sosaina.
¿Y a que viene todo esto? Pues a que os traigo por aquí el quinto single del disco, "Surrender my heart", que es la canción con la que abre el disco, y que cuando la escuche por primera vez me encantó a la primera, porque es todo lo que una canción que abre un disco tiene que tener. Empezar pausada, para luego explotar en su estribillo y ser muy pegadiza y bailonga. Cuenta con un videoclip super largo, rodado en un teatro de Broadway.
Además, aprovecho para traeros a su telonero, Lewis Ofman, un musico y productor francés, que hace música electrónica bastante curiosa y pegadiza, y que sacó a mediados del pasado año un single junto a Carly Rae Jepsen titulado "Move me" que no esta nada mal, aunque me esperaba escucharla en directo en algún momento, y ni el ni ella la tocaron. Una pena, porque los dúos chico chica ya sabéis que me encantan. El caso es que el chaval animó bastante el concierto antes de empezar, una tarea difícil para el telonero. Pero supo meterse al publico en el bolsillo, que lo dió todo con el. Os dejo con la colaboración que os he mencionado, aunque no cuenta con videoclip como tal.
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