Además de ella aproveche para descubrir a Sylvan Esso, una dúo
electrónico que me recordó un poco a Delaporte pero en su versión inglesa; para
volver a ver a Years & Years tras el Dcode; para escuchar “Wonderwall” en
directo de la mano de Liam Gallagher, que es una de mis canciones favoritas de
la historia (nótese la ironía, ya que la tengo un poco atragantada); para ver
muy de lejos a los Red Hot Chili Peppers; o para ver a la que tenia más ganas
de toda esa tarde noche, a M.I.A.
Con un ligero retraso en la hora de inicio, apareció en el
escenario con su chándal rosa fucsia, junto a sus bailarinas de amarillo fosforito,
y no tardó en aparecer una de mis canciones favoritas de su discografía y una
de las mas aplaudidas, “Bad girls”. Siguieron pasando los temas y cayendo la
noche hasta que tocó el turno de “Borders”, otro de sus canciones más conocidas.
Aunque todo eso quedó en nada cuando empezaron a sonar los acordes de su canción
más famosa, “Paper planes”, que tuvo una intro muy estirada mientras se cambiaba
de ropa, y en donde se entregó al público tirándose sobre el en ciertos
momentos. Pero no fue la última canción del repertorio, sino que mientras gran
parte del publico huía para coger sitio en el siguiente concierto importante,
el de los Red Hot Chili Peppers, M.I.A. aprovechó para cerrar el concierto con
la preciosa balada de su último disco publicado el pasado 2022, con el nombre
de “Marigold”, que habla sobre que en tiempos difíciles y críticos necesitamos
un milagro, y es la canción elegida para esta publicación, así que espero que
os guste.
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